Por Carolina Abell Soffia Afirma Pilar Ovalle (1970) La mujer-huracán de la escultura chilena actual enfatiza que en arte “no se puede transar” y reconoce el apoyo de la reconocida escultora Elisa Aguirre, “ha sido decisivo para mi desarrollo creador”.
Hemos olvidado, a veces, que venimos de la tierra e indefectiblemente volvemos a ella. Somos tierra desde tiempos prehistóricos y Bíblicos. Somos, en parte, fango. Barro con alma. Barro con color como la pintura. Tierra pigmentada y acuosa como la acuarela. Materia viva que, con el transcurso del tiempo normalmente muta hasta desvanecerse en la misma entraña de este planeta intervenido, mutilado y que -cada día con más violencia- es exigido por el mismo ser que lo requiere para existir.